ARTICLE AD BOX
Las anécdotas, sonrisas y lágrimas de satisfacción de atletas y propulsores deportivos fueron los principales elementos que adornaron la bienvenida a 11 nuevos inmortales. Entre rodillas temblorosas por los nervios y suspiros por contener las emociones fue celebrado este domingo el 58 ceremonial de inducción al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, que estuvo dedicado a los medallistas olímpicos dominicanos en París 2024, Marileidy Paulino, Yunior Alcántara y Cristian Pinales.
Clase 2024
La clase 2024 del Pabellón de la Fama incluyó a Octavio Dotel, ex-lanzador Grandes Ligas; Mayo Sibilia, considerada como la madre de las Reinas del Caribe; Joel Ramírez, uno de los más ganadores del baloncesto nacional.
De igual modo fueron inmortalizados, José Armando Castillo, leyenda del softbol; Cristian Cruz, uno de los más exitosos voleibolistas del país; Luis Ángel Montalvo, un prominente dirigente que permaneció 70 años ligados al béisbol.
Puedes leer: Clase 2024 Pabellón de la Fama termina de tallar su obra al ser exaltados a la inmortalidad deportiva
También fueron elevados al monte de los dioses del deporte local, Fernando Hernández, uno de los lanzadores más dominantes del béisbol invernal; Wendy Santana, ex levantadora de pesas que puso en alto al país en diferentes eventos internacionales; Félix Díaz, ganador de oro olímpico en Beijing 2008; Ana Villanueva, referente del karate femenino dominicano y Víctor Estrella, el más grande tenista que ha nacido en el país.
Emotividad
La emotividad dentro de los discursos no se hizo esperar y cada uno de los hoy inmortales relató parte de sus vivencias en el deporte. Víctor Estrellas reveló que llegó al tenis como un castigo; Ana Villanueva manifestó que solo necesitó de una oportunidad para destacarse.
Los inmortales Marisela Peralta (atletismo) y Amaury Cordero (pesas) portan las banderas, respectivamente, del Pabellón de la Fama y de la República Dominicana.
Octavio Dotel dijo que nunca pensó que el béisbol le llevaría tan lejos; Wendy Santana sostuvo que por fín había llegado un día tan esperado y por el cual había orado.
Félix Díaz relató como el boxeo le transformó la vida luego de estar trabajando en un carwash; Mayo Sibilia, una de las más aplaudidas, manifestó que siempre ha estado ahí para guíar a las jóvenes voleibolistas.
Joel Ramírez lanzó un discurso esperanzador y motivador para los jóvenes que están en los barrios; Cristian Cruz habló de la pasión que puso en cancha jugando voleibol tanto para su natal Bameso como para la selección.
La tribuna
El evento que sirvió para dar gracias a decenas de personas que de una forma u otra contribuyeron a las carreras de los nuevos exaltados, también se convirtió en una tribuna para reclamar a las autoridades gubernamentales más respaldo a los deportistas.
El padre Candelario Mejía, de la Pastoral Deportiva la Arquidiócesis del Gran Santo Domingo, tras bendecir la actividad, pronunció un sermón exigiendo una mayor inversión para el desarrollo del deporte. Manifestó que los jóvenes necesitan mayor oportunidades e indicó que el deporte es una vía.
El cinco veces campeón olímpico en lucha olímpica, Mijaín López, fue reconocido. «Agradezco la distinción que le hacen a un atleta que representó con valentía y entrega a mi deporte, a mi país y a toda nuestra comunidad latina», expresó el cubano Mijaín, quien fue ovacionado.
Un apunte
Lúcido
Luis Ángel Montalvo señaló que a sus 92 años de vida el tiempo no le daría para relatar 70 años ligados al béisbol.