La hija de María Corina Machado recibe el Nobel por su madre

La líder opositora venezolana María Corina Machado, galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2024, no pudo asistir a la ceremonia oficial en el ayuntamiento de Oslo. Aun así, el Instituto Nobel Noruego confirmó que la dirigente “estará con nosotros en las próximas horas”, lo que despejó las dudas surgidas durante la mañana sobre su paradero y seguridad.

La distinción fue recibida por su hija, Ana Corina Sosa Machado. Ella viajó a la capital noruega para participar en el acto y ofrecer un emotivo discurso en nombre de su madre. Según declaraciones oficiales, Machado enfrentó un viaje marcado por “una situación de peligro extremo”. Esa condición le impidió llegar a tiempo para la ceremonia encabezada por los reyes Harald y Sonja, junto a líderes latinoamericanos como Javier Milei y Daniel Noboa.

El organismo informó que, tras horas de incertidumbre, la galardonada se encuentra fuera de peligro y en camino a Oslo. “Ha hecho todo lo posible para asistir hoy. Aunque no podrá participar en los eventos programados, celebramos que esté a salvo”, indicó el comunicado.

Un reconocimiento a una trayectoria marcada por la resistencia democrática

El Premio Nobel de la Paz otorgado a María Corina Machado reconoce “sus incansables esfuerzos para promover los derechos y libertades en Venezuela” y su defensa de “una transición pacífica hacia la democracia”. Es la primera vez que una venezolana recibe esta distinción, un hecho histórico para la política del país y para los movimientos prodemocracia en la región.

Desde el anuncio realizado en octubre, el Comité Noruego destacó que el trabajo de Machado refleja un compromiso sostenido pese a la prolongada represión del Estado venezolano. La líder opositora reaccionó entonces con sorpresa. “Dios mío… No tengo palabras”, dijo al conocer la noticia. También afirmó que aceptaba el reconocimiento “con humildad, en nombre del pueblo de Venezuela”.

La trayectoria de Machado se remonta a 2003, cuando desde la organización Súmate impulsó la recolección de firmas para activar el referendo revocatorio contra Hugo Chávez. Desde entonces se convirtió en una de las voces más visibles del movimiento democrático venezolano. En 2010 fue electa diputada y en 2012 protagonizó un recordado intercambio con Chávez tras cuestionar las políticas de nacionalización. Su frase “Expropiar es robar” quedó grabada en la memoria política del país.

Un contexto político marcado por la clandestinidad y la represión

El reconocimiento llega en un momento crítico para la oposición venezolana. Desde enero de 2024, Machado no ha aparecido públicamente. Denunció una escalada represiva impulsada por el gobierno de Nicolás Maduro tras las protestas generadas por las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. Esos resultados fueron ampliamente cuestionados.

A finales del año pasado, la dirigente anunció que entraba en clandestinidad para proteger su vida y coordinar acciones políticas desde la reserva. La ola represiva dejó más de 2.000 detenidos, incluidos decenas de líderes opositores. Diversas organizaciones internacionales han condenado esta situación.

Aunque fue electa en octubre de 2023 como candidata unitaria de la oposición, el gobierno le prohibió participar en las elecciones presidenciales. En respuesta, Machado respaldó al diplomático Edmundo González Urrutia, a quien la oposición atribuye un triunfo con el 66% de los votos. Esa cifra se basa en actas verificadas que el Consejo Nacional Electoral nunca presentó públicamente.

Este contexto de persecución y restricciones electorales añade peso al anuncio de Oslo. El Nobel no solo reconoce la trayectoria de Machado, sino que también coloca a Venezuela en el centro del debate global sobre autoritarismo, represión y derechos humanos.

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