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La Navidad no solo transforma la decoración de las casas y las calles. Las fragancias que perfuman las estancias de nuestra casa también se adaptan a la época del año.
Esta necesidad de adaptar los aromas al momento en el que nos encontramos se multiplica durante la Navidad. La nostalgia se apodera de nosotros y caemos rendidas ante aquellas fragancias que nos transportan a nuestra infancia. En este sentido, son los olores propios de las especias, platos y dulces navideños los que acaparan esa capacidad de hacernos viajar en el tiempo.
Y es que la Navidad trae sus propios olores, desde los aromas más dulces de la canela hasta notas frescas de pino, así como también las de jengibre, naranja o las de caramelo son las favoritas para perfumar las casas.
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Tipos para colocar olores naturales
Tomar varios palitos de canela y decorar una vela con ellos es una manera de potenciar el olor, al tiempo que agregas la estética de temporada en una esquina de tu casa o en el área en la que recibes a tus invitados.
Que los arbolitos más prácticos sean artificiales, no significa que no puedas agregar en tu decoración ramitas de pino natural. Nada como el olorcito a montaña impregnado en tus espacios.
El olor dulce del azúcar morena es muy típico de la temporada y puedes encontrarlo en aceites esenciales para colocar dentro de hermosos difusores. Todo depende del gusto.