Paula Santana merece justicia

La noticia del archivo provisional del caso de Paula Santana Escalante, el 21 de agosto pasado, ha causado una indignación generalizada. La autopsia practicada al cuerpo de la joven de 23 años reveló que murió por asfixia y que previamente fue violada.

Los fiscales de Santo Domingo Este que investigan el caso solicitaron al tribunal el archivo provisional y el cese de las medidas de coerción contra los dos hombres que originalmente fueron acusados de cometer el crimen, por una alegada falta de pruebas.

El archivo provisional es un paso previo para que se termine de archivar de manera definitiva el expediente. La sociedad que ha protestado por el fin de la impunidad en el sistema de Justicia no debe permitir que ese crimen quede sin sanción. Mucho menos, la gestión de la Procuraduría General de la República que encabeza Miriam Germán, debe permitirse esa mancha.

Según algunos reportes de prensa, el padre de la víctima se ha quejado por lo que ha calificado como un desempeño débil de los fiscales que investigan su muerte. Se sabe que, en materia de investigación, las autoridades son eficientes, basta con revisar cómo encuentran a los responsables de casos recientes como los asaltos a bancos u otros sonoros.

La debilidad que les atribuyen los familiares de Paula Santana a los investigadores empieza a generar sospechas de que se trata de una dejadez intencional para que el caso quede impune.

Ojalá que el desarrollo de ese expediente en los meses por venir desmienta la creencia de la mayoría de que se trata de tapar a los responsables o al responsable de ese crimen, lo que sería inaceptable para toda la sociedad dominicana.

Las debilidades al sistema de justicia dominicano siempre se han identificado el tema de la prevención, pero no en la investigación ni en la persecución de los crímenes y delitos.

La autopsia al cadáver de Paula Santana reveló que fue violada y estrangulada, si el papel de las autoridades es determinar quién o quiénes lo hicieron. ¿Por qué no lo hacen?