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El 10 de marzo, es el Día Internacional de la Peluca, accesorio que empezó siendo todo un producto de lujo en las antiguas civilizaciones, y que, desde entonces, ha sido ampliamente utilizado por diferentes razones estéticas, de higiene e, incluso, como símbolo de un oficio en el caso de abogados y jueces.
Las pelucas han sido utilizadas a lo largo de la historia con distintos propósitos, desde razones estéticas hasta médicas o artísticas. Actualmente, su uso se ha diversificado, ofreciendo múltiples opciones para quienes buscan cambiar su apariencia o necesitan una alternativa capilar.
A continuación, se presentan diferentes maneras de utilizar pelucas y consejos para su mejor aplicación.
Uso de pelucas a lo largo de la historia

El uso de pelucas se remonta a civilizaciones antiguas, donde desempeñaban roles significativos en la cultura y el estatus social:
- Egipto antiguo: eran utilizadas por la nobleza y los sacerdotes para protegerse del sol y los piojos. Se elaboraban con cabello humano, lana de oveja y fibras vegetales.
- Grecia y Roma: en la sociedad romana, se usaban como símbolo de estatus y para ocultar la calvicie. Se importaban cabellos de esclavos germánicos y asiáticos para fabricar pelucas de alta calidad.
- Renacimiento y Barroco: en los siglos XVI y XVII, se convirtieron en un símbolo de poder y elegancia, especialmente en la corte francesa. Reyes como Luis XIV de Francia popularizaron las pelucas voluminosas y ornamentadas.
- Siglo XVIII: durante esta época, las pelucas empolvadas eran un accesorio esencial entre la aristocracia europea, tanto para hombres como para mujeres.
- Siglos XIX y XX: el uso de pelucas disminuyó con la llegada de estilos de cabello más naturales, pero se mantuvo en el mundo del teatro y la moda.
- Actualidad: las pelucas han evolucionado y se utilizan en múltiples ámbitos, desde el entretenimiento y la moda hasta la medicina y el uso cotidiano.
1. Uso diario

Para quienes desean llevarlas como parte de su imagen cotidiana, existen modelos cómodos y transpirables. Las pelucas de cabello natural o sintético de alta calidad ofrecen un aspecto realista y pueden adaptarse a distintos estilos y ocasiones.
- Pelucas de encaje frontal: proporcionan una apariencia natural en la línea del cabello, ideales para un look diario sin que se note la diferencia.
- Pelucas completas: cubren toda la cabeza y permiten cambiar el color y la textura del cabello de manera instantánea.
- Pelucas parciales o postizos: se combinan con el cabello natural para añadir volumen y longitud.
Beneficios del uso diario de pelucas:
- Permiten cambiar de estilo sin comprometer el cabello natural con tintes o productos químicos.
- Son una excelente solución para quienes sufren de pérdida de cabello o tienen problemas capilares.
- Ahorran tiempo en la rutina de peinado y estilismo.
- Protegen el cabello natural de daños por el calor o la contaminación.
- Existen opciones livianas y transpirables que brindan comodidad durante todo el día.

Contras del uso diario de pelucas:
- Puede generar sensación de calor y sudoración en climas cálidos si la peluca no es adecuada.
- Algunos modelos pueden ser costosos, especialmente los de cabello natural.
- El uso prolongado sin los cuidados adecuados puede afectar la salud del cuero cabelludo.
- Se requiere un mantenimiento constante para que la peluca conserve su aspecto natural y durabilidad.
Mantenimiento adecuado para el uso diario:
- Limpieza regular: se recomienda lavar la peluca después de 8 a 10 usos con un champú específico para pelucas. Para las sintéticas, evitar el uso de calor.
- Almacenamiento correcto: guardar la peluca en un soporte o maniquí para mantener su forma y evitar enredos.
- Hidratación: si es de cabello natural, aplicar aceites ligeros para mantener la suavidad y brillo.
- Evitar fricción excesiva: no dormir con la peluca puesta ni usar accesorios que la dañen.
- Revisar el ajuste: asegurar que no esté demasiado apretada para evitar molestias o afectar la circulación del cuero cabelludo.
Consejos:
- Optar por pelucas con base de silicona o monofilamento para una sensación más natural.
- Buscar modelos con ajuste seguro y sin costuras ásperas para evitar irritaciones.
- Consultar con un especialista en prótesis capilares para encontrar la mejor opción.
