Internos en Cárceles Dominicanas Inician Estudios Universitarios: Un Paso Hacia la Rehabilitación
Un Nuevo Capítulo en la Rehabilitación Penitenciaria
En un esfuerzo por mejorar la calidad de vida y las oportunidades de los internos en las cárceles dominicanas, la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC) ha relanzado un ambicioso programa universitario. Este initiative, que se llevará a cabo en varios centros penitenciarios del país, marca un hito significativo en la búsqueda de la rehabilitación y la reintegración social de los reclusos.
Colaboración y Apoyo Institucional
El programa se implementará gracias a acuerdos rubricados entre la Procuraduría General de la República, la Fundación Mujeres por la Educación y la Universidad de la Tercera Edad (UTE). Esta colaboración interinstitucional es crucial para brindar acceso a la educación superior a los internos, ofreciéndoles una segunda oportunidad para mejorar sus vidas y contribuir positivamente a la sociedad una vez cumplan sus condenas.
Implementación y Alcance
Un total de 93 nuevos internos iniciarán sus estudios universitarios en centros como el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres, el CCR San Cristóbal, y el CCR La Isleta en Moca. De estos, 52 se inscribirán en la carrera de Administración de Empresas y 41 en Mercadotecnia. Este relanzamiento incrementa la matrícula de internos en educación superior de 499 a 592, reflejando el creciente compromiso con la educación y la rehabilitación.
Impacto Positivo en la Vida de los Reclusos
El director general de la DGSPC, coronel Roberto Hernández Basilio, destacó que cada año más internos se integran a estudios de nivel superior, lo que ha impactado positivamente en muchas vidas. A través de estos estudios, los reclusos no solo adquieren conocimientos académicos, sino que también desarrollan habilidades y competencias que les permitirán reintegrarse de manera efectiva en la sociedad. Actualmente, más de 500 egresados de carreras universitarias como Derecho, Psicología y Educación, entre otras, son un testimonio vivo de este éxito.
Una Realidad Palpable
Lo que una vez parecía una quimera – la educación superior dentro de un centro penitenciario – es hoy una realidad palpable. La DGSPC ha trabajado incansablemente para hacer de esta visión una realidad, y los resultados son alentadores. La educación no solo es un derecho, sino también una herramienta poderosa para la transformación y la rehabilitación.
Un Enfoque Integral
Además de la educación universitaria, el sistema penitenciario dominicano ha implementado various programas educativos y de formación técnica. En 2021, por ejemplo, casi cuatro mil privados de libertad fueron alfabetizados, y otros casi cinco mil completaron sus ciclos de educación básica y media. Además, 9,773 internos se certificaron para distintos oficios, y 3,388 están inscritos en cursos técnicos, la mayoría impartidos por el Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (Infotep).
Un Futuro Esperanzador
Este relanzamiento del programa universitario no solo es un paso hacia la rehabilitación de los internos, sino también un reflejo del compromiso de la sociedad dominicana con la justicia restaurativa y la reintegración social. Es un llamado a la esperanza y al cambio, demostrando que, incluso en los entornos más desafiantes, la educación puede ser un catalizador para el progreso y la transformación.