Reforma Constitucional: Un Paso Hacia el Futuro de la República Dominicana
En un esfuerzo por fortalecer y modernizar las instituciones democráticas de la República Dominicana, la Asamblea Nacional Revisora ha iniciado un proceso de reforma constitucional que promete ser un hito significativo en la historia del país. Esta iniciativa, impulsada por el presidente Luis Abinader, busca introducir cambios fundamentales en varios aspectos de la Constitución, con el objetivo de consolidar la estabilidad, la transparencia y la institucionalidad.
Convocatoria y Objetivos
La convocatoria a la Asamblea Revisora fue coordinada por los presidentes del Senado, Ricardo de los Santos, y de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco. El presidente Abinader considera necesaria la reforma de varios artículos de la Constitución para garantizar la estabilidad constitucional de las reglas de elección presidencial, consolidar la independencia del Ministerio Público, unificar las elecciones y reducir la cantidad de diputados.
Unificación de Elecciones
Uno de los cambios más significativos propuestos es la unificación de las elecciones presidenciales, congresuales y municipales. Según la reforma, todos los comicios se celebrarán el segundo domingo de mayo cada cuatro años, lo que sincronizará los periodos constitucionales y facilitará la organización y el proceso electoral. Esta medida fue aprobada en primera lectura por la Asamblea Nacional, pese a las objeciones de algunos opositores que argumentaron posibles complicaciones en la logística electoral.
Limitación de Mandatos Presidenciales
Otro punto crucial de la reforma es la prohibición de que los presidentes se mantengan en el poder más allá de dos periodos constitucionales. Esta disposición busca erradicar el caudillismo y el personalismo continuista, asegurando una rotación democrática en el cargo presidencial y prevenir futuras modificaciones que puedan favorecer la reelección indefinida.
Independencia del Ministerio Público
La reforma también se enfoca en consolidar la autonomía constitucional del Ministerio Público. Se busca especializar sus funciones y establecer un proceso más transparente y independiente para la designación del Procurador General de la República, quien será propuesto por el Presidente de la República y elegido por el Consejo Nacional de la Magistratura. Esto fortalecerá la independencia del Ministerio Público y evitará que su condición institucional quede a merced de decisiones unilaterales del gobernante de turno.
Reducción de Diputados
Además, se propone reducir la cantidad de diputados en la Cámara de Diputados, pasando de la actual cantidad a un total de 137 representantes. Esta modificación busca mejorar la dinámica y la eficiencia de la cámara legislativa, lo que entraría en efecto a partir de las elecciones congresuales de 2028.
Proceso de Reforma
El proceso de reforma constitucional requiere una votación especial de las dos terceras partes de los asambleístas presentes en la Asamblea. Dada la mayoría aplastante del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y sus aliados, que cuentan con 176 legisladores, la aprobación de la reforma no enfrenta obstáculos significativos en términos de votos.
Reacciones y Participación
Aunque la oposición, representada por partidos como el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y la Fuerza del Pueblo, ha expresado su disconformidad con algunos aspectos de la reforma, considerándolos innecesarios, han anunciado que estarán presentes durante todo el proceso para vigilar y participar en las discusiones. La transparencia y la inclusión de todos los sectores de la sociedad son fundamentales en este proceso, según declaraciones del presidente del Senado, Ricardo de los Santos.
Conclusión
La reforma constitucional en curso es un paso significativo hacia la consolidación de la democracia y la institucionalidad en la República Dominicana. Con cambios que abarcan desde la unificación de elecciones hasta la independencia del Ministerio Público, y la limitación de mandatos presidenciales, este proceso busca asegurar un futuro más estable y transparente para el país. La participación activa de todos los sectores políticos y sociales es crucial para garantizar que estas reformas reflejen los intereses y necesidades de la población dominicana.