El Instituto Duartiano saludó este sábado el decreto número 566-20 del presidente Luis Abinader
Rosa Duarte, una vida de entrega y sacrificios por la causa de la independencia
El Instituto Duartiano saludó este sábado el decreto número 566-20 del presidente Luis Abinader que dispone el traslado al Panteón Nacional de los restos de Rosa Duarte y Díez, heroína de la sociedad secreta La Trinitaria y hermana del padre de la patria, Juan Pablo Duarte.
Al valorar como muy positiva la medida, el presidente del organismo, doctor Wilson Gómez Ramírez, indicó que esa disposición ordena erigir un cenotafio con la inscripción del nombre de Rosa Protomártir Duarte Diez, hasta tanto se localicen sus despojos mortales y se trasladen a su sepultura en el Panteón de la Patria.
“Un cenotafio será destacado en ese recinto sagrado porque los restos de esta extraordinaria dominicana no se han podido localizar en el cementerio General del Sur, en la ciudad de Caracas, Venezuela, en vista reexcavaciones que se realizaron en ese camposanto”, explicó.
Gómez Ramírez dijo que “con este tributo el pueblo dominicano honra una deuda de eterna gratitud con esta excepcional dominicana que se entregó a los trabajos patrióticos desde La Trinitaria, la Dramática y la Filantrópica para llevar conciencia hasta conseguir la independencia nacional.
El presidente del Instituto Duartiano resaltó la labor de la heroína, afirmando que “Rosa Duarte fundió las planchas de plomo del almacén de su padre, Juan José Duarte Rodríguez, y fabricó municiones que fueron llevadas a la Puerta del Conde la noche gloriosa del 27 de febrero de 1844”.
Manifestó que la dama asumió con entereza las responsabilidades de la familia Duarte-Díez, la cual resistió con gallardía y coraje las persecuciones, arbitrariedades y abusos, primero, de los invasores haitianos, y luego del déspota general Pedro Santana.
Apuntó que Rosa Duarte aportó la obra bibliográfica titulada «Apuntes para la Historia de la Isla de Santo Domingo y del Diario de Rosa Duarte», considerado por los historiadores como la principal fuente documental fiable sobre la vida y trayectoria política del padre de la patria Juan Pablo Duarte y Díez.
Rosa Protomártir Duarte y Díez nació en Santo Domingo, el 28 de junio de 1820, tras sufrir junto a su familia un largo exilio de más de cuatro décadas y habiendo realizado una importante labor humanitaria, falleció en Caracas, Venezuela, el 25 de octubre de 1888, y fue sepultada al día siguiente del referido año, en el cementerio General del Sur.
ROSA DUARTE
Nació en Santo Domingo, en el barrio de Santa Bárbara, el veintiocho de junio de 1820, hija de Juan José Duarte Rodríguez y Manuela Diez Jiménez. Su nombre de pila es Rosa Protomártir.
“Mujer de talento natural y de virtudes sobresalientes, supo conservar hasta el fin de sus días en estado de pureza, todos los sentimientos nobles y delicados que le inculcaron sus padres con una educación esmerada, habiendo rendido siempre un culto especial al que entre sus deudos era don natural: el del patriotismo, que no pudieron mitigar en ella ni la injusticia de los hombres ni el rigor del infortunio”, se escribió en su necrología.
Prefirió acompañar a su madre, condenada al destierro, antes que casarse en la Patria con su prometido, Tomás de la Concha, quien además fue su maestro balero y que fue fusilado junto con Duvergé en 1855. Era de estatura esbelta, enfática en el hablar, según Emilio Rodríguez Demorizi. En Venezuela fue sostén y aliento de todos sus desafortunados parientes.
El 26 de octubre de 1888 falleció en la calle Sur 1, casa 129, de Caracas, a causa de disentería. Al año murió su hermana Francisca y un año después, el ocho de agosto de 1890 murió Manuel, también en Caracas, con cuya partida desapareció por completo la familia Duarte Diez.
La calle Rosa Duarte nace en la avenida Bolívar y muere en la avenida 27 de Febrero.
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