Recuperación del Río Ozama: Un Proyecto que Transformará la Margen Oeste
En un esfuerzo significativo para restaurar y proteger uno de los ríos más emblemáticos de la República Dominicana, la Unidad para la Readecuación de Barrios y Entornos (URBE), adscrita al Ministerio de la Presidencia, ha lanzado una licitación pública nacional para la contratación del servicio de la Fase Mudanza y Acarreo para la Recuperación de las Márgenes del Lado Oeste del Río Ozama, específicamente en el sector Las Lilas de Santo Domingo Este.
Antecedentes y Objetivos
El proyecto Recuperación Márgenes del Ozama en Las Lilas es parte de una serie de iniciativas que buscan rescatar una longitud aproximada de 1 km en la ribera del río Ozama. Esta iniciativa es crucial no solo para el saneamiento ambiental del río, sino también para evitar las inundaciones de edificaciones que se encuentran en zonas de riesgo y mejorar la calidad de vida de las comunidades vecinas[1][2][4].
Acciones y Metodología
Para llevar a cabo este proyecto, se han realizado levantamientos censales de las edificaciones y familias que ocupan la franja propuesta de intervención. Posteriormente, se agotará el proceso de indemnización, traslado de familias y demolición de las edificaciones. Una vez liberado el espacio, se realizarán los estudios, diseño y construcción de las obras que servirán de barrera de protección entre la margen del río y el suelo urbano urbanizable. Finalmente, las obras serán entregadas a las instituciones responsables para su debida gestión[1][2][4].
Impacto Ambiental y Social
La ejecución de este proyecto permitirá reducir significativamente la contaminación del río Ozama, mejorar la calidad del agua, y reducir el vertido de desechos sólidos. Además, se darán pasos avanzados hacia la navegabilidad del río Ozama y se dotarán los sectores colindantes de equipamientos deportivos. Este esfuerzo también incluye la eliminación de asentamientos en condiciones de riesgo ante fenómenos naturales, focos de contaminación o riesgos derivados de la acción humana[1][2].
Infraestructura y Protección
Para la protección del espacio liberado, se propone la construcción de una vía de servicio y un espacio de siembra natural, creando una barrera entre la margen del río y el suelo urbano urbanizable de los barrios del sector Los Tres Brazos. Este enfoque no solo protegerá el entorno, sino que también mejorará las condiciones de vida de las familias que actualmente se encuentran en zonas vulnerables[1].
Historia de Esfuerzos de Recuperación
La recuperación del río Ozama no es un esfuerzo nuevo; ha habido múltiples iniciativas a lo largo de los años. Desde el desalojo y reubicación de barrios en la década de 1950 durante el gobierno de Rafael Leónidas Trujillo, hasta proyectos más recientes como el Plan Maestro de Saneamiento del río Ozama y el programa Rescate Social Urbano y Ecológico de los Barrios Marginados de Santo Domingo (Resure), han demostrado el compromiso continuo del gobierno y de diversas organizaciones por sanear y preservar el río[3].
Colaboración Internacional y Tecnología
Además de los esfuerzos nacionales, la recuperación del río Ozama ha contado con el apoyo de colaboraciones internacionales. Un ejemplo notable es la operación del Interceptor 004, una embarcación donada por la organización The Ocean Cleanup, que opera con energía solar y puede extraer más de 100 mil libras de plásticos al día. Esta iniciativa, apoyada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Embajada del Reino de los Países Bajos, y diversas instituciones del sector público y privado, marca un paso significativo hacia la reducción de la contaminación por plásticos en el río Ozama y el mar Caribe[5].
Conclusión
El proyecto de Recuperación de las Márgenes del Río Ozama en Las Lilas es un paso crucial hacia la rehabilitación, saneamiento, preservación y uso sostenible de las cuencas de los ríos Ozama e Isabela. Este esfuerzo no solo refleja el compromiso del gobierno dominicano con el medio ambiente y la calidad de vida de sus ciudadanos, sino que también demuestra la importancia de la colaboración internacional y la innovación tecnológica en la resolución de desafíos ambientales. Con la ejecución de este proyecto, la República Dominicana avanza hacia un futuro más sostenible y protegido para sus recursos naturales.
