USAID Impulsa un Proyecto Innovador para la Reducción de Residuos Sólidos en la República Dominicana
En un esfuerzo por abordar uno de los desafíos ambientales más significativos de la región, la Agencia de los EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID) ha lanzado un ambicioso proyecto de cinco años destinado a reducir los residuos sólidos en varias provincias de la República Dominicana. Este iniciativa, que se centra en las provincias de Dajabón, Montecristi, Puerto Plata y la costa norte de la provincia Espaillat, busca minimizar la cantidad de plásticos y otros desechos que contaminan el medio ambiente y llegan al mar a través de los ríos.
Objetivos del Proyecto
El nuevo proyecto de la USAID se estructura alrededor de tres objetivos interconectados:
- Desarrollar capacidades y fortalecer la gobernanza: A nivel nacional y municipal, se busca implementar las mejores prácticas de Gestión Integral de Residuos Sólidos (GIRS). Esto incluye apoyar al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Liga Municipal Dominicana, y los gobiernos locales para mejorar la gobernanza en la gestión de residuos municipales.
- Aumentar la adopción comunitaria de prácticas sostenibles: Se pretende fomentar la adopción de prácticas de GIRS sostenibles en las comunidades, lo que requiere un cambio de cultura y comportamiento que comience en cada ciudadano.
- Establecer y expandir modelos de economía circular: En colaboración con el sector privado, se busca crear y ampliar modelos de economía circular que aprovechen los residuos de manera sostenible[2][3].
Implementación y Colaboraciones
El proyecto es implementado por un consorcio de organizaciones sin fines de lucro, liderado por Winrock International, una institución con amplia experiencia en cooperación para el desarrollo. Otros participantes clave incluyen ICMA, que es líder a nivel internacional en el desarrollo de capacidades para la gestión municipal; FEDOMU, la Federaciación Dominicana de Municipios, que promueve la autonomía política, administrativa y financiera de los gobiernos locales; y el INTEC, una universidad dominicana con trayectoria en temas ambientales, cambio climático y gestión de residuos[2].
Impacto Ambiental y Salud Pública
La directora de la USAID, Rebecca Latorraca, destacó la gravedad del problema de la contaminación por plásticos, citando un análisis del World Wildlife Fund realizado por la Universidad de Newcastle en Australia. Según este estudio, una persona ingiere aproximadamente cinco gramos de plásticos a la semana, lo que subraya la urgencia de reducir la contaminación de los océanos al prevenir que residuos plásticos sean liberados al ambiente. El proyecto también resalta la importancia del involucramiento de todos los actores y de temas transversales como la equidad de género, la inclusión y las oportunidades para los grupos más vulnerables[2].
Alineación con la Estrategia Nacional
Este proyecto se alinea con la estrategia de cooperación entre la USAID y la República Dominicana, respondiendo a prioridades identificadas por ambos gobiernos. La República Dominicana cuenta con un Plan Nacional para la Reducción de Residuos Marinos, cuya meta es tener playas y costas libres de residuos originados en el país para 2030. La iniciativa de la USAID es crucial para alcanzar este objetivo, fortaleciendo las capacidades de los gobiernos locales para una gestión integral de residuos sólidos sostenible[2].
Lanzamiento y Participación
El proyecto fue presentado en un panel que contó con la participación de las instituciones gubernamentales involucradas. El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Lic. Paíno Henríquez, y el Sr. Nelson Núñez, alcalde de Samaná y presidente interino de FEDOMU, fueron algunos de los destacados asistentes. El evento de lanzamiento se llevó a cabo en el Monumento a Fray Antón de Montesinos, un lugar simbólico donde frecuentemente se acumulan los residuos que arrastra el río Ozama hasta el mar Caribe[2].
Este proyecto no solo representa un paso significativo hacia una gestión más sostenible de los residuos en la República Dominicana, sino que también refuerza la cooperación internacional y el compromiso con la protección del medio ambiente y la salud pública. La colaboración entre la USAID, el gobierno dominicano y las organizaciones locales es esencial para lograr un futuro más sostenible y saludable para las generaciones venideras.
