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El renacer de The New York Band: un ícono dominicano que une generaciones con su música

Descubre cómo The New York Band renace con fuerza en Hard Rock Café, un ícono dominicano que une generaciones con su música y energía renovada. Conoce su historia, su regreso y su impacto en la cultura musical de República Dominicana.

Un ícono que renace y abraza al público dominicano

Luego de seis años lejos de los escenarios, The New York Band volvió a encontrarse con su público y lo hizo con una presentación arrolladora el pasado lunes en Hard Rock Café, donde la energía del grupo provocó una inmediata respuesta de los asistentes. Desde que las luces se encendieron en la sala, quedó claro que la esencia de la agrupación continúa intacta: un sonido reconocible, una presencia escénica sólida y la nostalgia de una época que el público dominicano mantiene viva en su memoria colectiva. La icónica agrupación dominicana, que marcó una época en el merengue y el pop caribeño de los años ochenta y noventa, realizó una presentación que unió generaciones y reafirmó su vigencia incuestionable. Subió al escenario de Hard Rock Café a las once de la noche y concluyó minutos antes de la una de la madrugada, en una noche marcada por energía desbordante y un reencuentro muy esperado que movió los corazones de cientos de dominicanos concierto inolvidable.

Bajo nueva dirección, la misma magia

La orquesta, bajo la dirección de Franklyn Rivers, se presentó con un frente vocal afinado y dinámico compuesto por Irisneyda Santos, Tony Morales, Alexa Ramírez, Johnny Contreras y Rubén Ariel, quienes aportaron color, fuerza y modernidad a cada interpretación. La combinación de voces imprimió frescura y versatilidad, elementos que definieron el ritmo de un espectáculo que avanzó con firmeza desde los primeros compases. La química entre todos se sintió desde el inicio y se mantuvo durante toda la noche, creando una experiencia que fue tanto una celebración como un viaje nostálgico. El reconocido locutor Rubén Camilo fungió como maestro de ceremonias. En su intervención destacó la importancia histórica de la agrupación fundada por Wilfrido Vargas y Chery Jiménez, que alcanzó fama internacional bajo el liderazgo de su hijo, el inolvidable Cherito, cuya ausencia aún late en el imaginario popular. Sus palabras prepararon el terreno para una velada cargada de ritmo, memoria y emoción renace con fuerza.

Expresiones de gratitud y renovación

Entre agradecimientos y aplausos, Irisneyda Santos expresó su profunda gratitud por el respaldo del público a lo largo de los años. Su voz, potente y matizada, evocó la época en que la banda irrumpió con fuerza en la escena dominicana, demostrando que continúa en un nivel artístico excepcional. Por su parte, Franklyn Rivers compartió la emoción de reencontrarse con la fanaticada y aseguró que esta nueva etapa representa un impulso renovado para la icónica banda. El líder también presentó al DJ Molote, quien aporta frescura e innovación a la propuesta en vivo, así como a la cantante Alexa, nueva integrante que trae consigo una energía renovada. Estas adiciones al grupo demuestran que The New York Band se adapta a los tiempos modernos sin perder su esencia característica.

Un repertorio que recorre la historia dominicana

El repertorio incluyó veinticinco canciones que recorrieron la historia musical completa de la agrupación. Hubo clásicos que marcaron época, nuevas fusiones que demuestran evolución artística, y momentos inolvidables que conectaron directamente con el corazón del público Hard Rock en su regreso. El setlist incluyó: Si tú no estás, Si tú eres mi hombre, María, Dame vida, Nadie como tú, Miénteme, Ay mamá, Amada mía, Quiero saber qué es el amor, Eternal Flame, Juicy Lucy, Let's Twist Again, Dónde estará mi primavera, Chio Thrills, Qué piensas tú que soy, Hola, Amor en silencio, Cójelo pichao, Simplemente amigos, Corazón de azúcar, Cole, Levanta tu bandera y Dancing Mood. Cada canción fue recibida como un viaje directo al tiempo en que The New York Band marcó a toda una generación. Entre ovaciones espontáneas, coreografías improvisadas y un evidente entusiasmo colectivo, se reafirmó que la agrupación conserva un espacio privilegiado en el corazón del público dominicano. La sala se convirtió en un gran coro colectivo donde la música traspasó décadas y unió a personas de diferentes edades alrededor de la pasión compartida.

El cierre que unió pasado y presente

El cierre llegó con Dancing Mood, uno de los temas más emblemáticos de su repertorio, interpretado junto al comunicador Domingo Bautista, quien en los años noventa impulsó la popularidad de la canción en su programa La Súper Tarde. Fue un final vibrante que unió pasado y presente, evocando la fuerza con la que el tema se popularizó en esa era dorada de la música dominicana. El momento selló, con emoción profunda, un reencuentro largamente esperado que dejó a los asistentes con ganas de más.

Planes ambiciosos para el futuro

Con esta presentación, la banda —fundada por Chery Jiménez y relanzada en República Dominicana de la mano de Valenzuela Productions— inicia una nueva etapa artística. Para el próximo año, The New York Band planea regresar al país y embarcarse en una gira internacional que consolidará este renacer musical. Los planes incluyen presentaciones en Islas Canarias, Centroamérica y Sudamérica, con especial énfasis en Venezuela, uno de sus grandes bastiones históricamente. Además de las presentaciones en vivo, la agrupación trabaja en un ambicioso proyecto de reedicción de sus clásicos en vinilo, trayendo de vuelta los tiempos del LP donde la familia puede disfrutar nuevamente de los créditos y apreciar la artesanía musical en su forma más pura. Este proyecto representa una apuesta por mantener viva la tradición musical mientras se adaptan a las nuevas preferencias del mercado.

Un legado que permanece intacto

Su vuelta a los escenarios confirma que la agrupación está lista para seguir escribiendo historia con una propuesta que combina vigencia, nostalgia y una energía que conecta con diversas generaciones. The New York Band mantiene una conexión única con el público dominicano, demostrando que la música de calidad y la identidad cultural trascienden el tiempo. El ADN musical del conjunto se mantiene intacto, y su poder escénico continúa siendo capaz de reunir a personas de todas las edades alrededor de valores compartidos: la herencia musical dominicana, la celebración de la vida y la fuerza de la comunidad. En un mundo que cambia constantemente, The New York Band representa la permanencia de lo auténtico, la belleza de las raíces y la capacidad de la música para tejer lazos que perduran a través de las décadas.

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