El Éxito de los Lanzadores del Escogido: Un Orgullo para el Béisbol Dominicano
Una Historia de Éxito y Tradición
Los Leones del Escogido, uno de los equipos más emblemáticos y exitosos de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM), han consolidado su posición como una de las fuerzas dominantes del béisbol dominicano desde su fundación en 1921. Con 16 campeonatos nacionales y 4 títulos de la Serie del Caribe, el Escogido es un símbolo de la pasión y el talento que caracterizan al béisbol en la República Dominicana[1].
La Fortaleza del Pitcheo
En la actual temporada, los Leones del Escogido han demostrado una vez más su fortaleza, especialmente en lo que respecta al pitcheo. Con un récord de 15 victorias y 5 derrotas, el equipo ha destacado por la capacidad de sus lanzadores para contener la ofensiva de los contrarios. Los brazos del Escogido van segundos en porcentaje de carreras limpias y corredores embasados por entrada, registrando una impresionante efectividad de 2.95 y un WHIP de 1.21. Además, permiten un promedio de .230 a la oposición, lo que refleja la solidez y consistencia de su pitcheo.
Líderes en el Montículo
El coach de pitcheo, Jairo Cuevas, ha sido clave en el éxito de los lanzadores del Escogido. Cuevas atribuye el éxito de los serpentineros del equipo al control de la zona de strikes y a los ajustes realizados durante la campaña para mejorar la consistencia de los lanzamientos. "Es sumamente importante cada vez que tú puedes bajar la cantidad de boletos o manejar los conteos a tu favor", destacó Cuevas, resaltando la importancia de salir adelante en el conteo y llegar a dos strikes antes de llegar a dos bolas.
Abridores y Relevos Estelares
Los abridores Víctor Santos, Phillips Valdez y Eduardo Rivera han sido fundamentales en las últimas salidas del equipo. Santos y Valdez se han destacado por su capacidad para no dar boletos, mientras que Rivera ha mostrado una agresividad notable frente a cada oponente. Estos lanzadores no solo han evitado situaciones complicadas, sino que también han mantenido a los Leones en el partido y han sido eficientes en sus salidas.
Un Bulpen Invencible
El relevo de los Leones también ha sido una de las fortalezas del equipo, registrando más victorias que cualquier otro bullpen con 11 triunfos y apenas un revés. La reciente incorporación de lanzadores con experiencia en las Grandes Ligas, como Emmanuel Ramírez, Jeurys Familia y Yohan Ramírez, ha fortalecido aún más el bullpen, proporcionando una sólida defensa para proteger las ventajas obtenidas por los abridores.
Futuro Prometedor con Jóvenes Talentos
Además de los veteranos, los lanzadores más jóvenes del Escogido han demostrado ser un soporte crucial al inicio de la campaña. Jugadores como Carlos Jiménez, Joel Valdez, Jesús Báez y Capri Ortiz, seleccionados en el Sorteo de Novatos de la LIDOM, han mostrado un gran potencial y han contribuido significativamente al buen desempeño del equipo. Estos jóvenes talentos, provenientes de organizaciones como los Marineros de Seattle, los Piratas de Pittsburgh y los Padres de San Diego, aseguran un futuro prometedor para el Escogido[2].
Un Liderazgo Inspirador
Bajo el mando de Albert Pujols, quien asumió el cargo de mánager del equipo, los Leones del Escogido han encontrado un liderazgo inspirador que ha motivado a los jugadores a dar lo mejor de sí. Pujols, un ícono del béisbol dominicano y mundial, ha anunciado a los lanzadores que iniciarán los partidos de la temporada, incluyendo a Elián Leyva, Phillips Valdez, Eduardo Rivera, Connor Thomas y Víctor Santos, lo que refleja la confianza y el plan estratégico del equipo para el éxito[3].
Un Orgullo Nacional
El éxito de los lanzadores del Escogido no solo es un logro para el equipo, sino también un orgullo para el béisbol dominicano en su conjunto. La dedicación, el talento y la pasión que caracterizan a estos atletas son un reflejo de la rica tradición deportiva de la República Dominicana. Los Leones del Escogido continúan siendo un faro de esperanza y un símbolo de la excelencia en el deporte rey, inspirando a generaciones de jugadores y aficionados.