Una Región en Transformación Energética
América Latina y el Caribe vivieron un momento histórico en junio de este año cuando alcanzaron un 71% de generación eléctrica renovable, el nivel más alto registrado durante 2025. Este hito regional refleja un compromiso continental con la sostenibilidad y la transición hacia matrices energéticas más limpias, posicionando al continente como un referente global en la adopción de fuentes renovables. La Organización Latinoamericana de Energía confirmó que la región generó 159 teravatios hora de electricidad, con casi tres cuartas partes provenientes de fuentes limpias informe reciente de OLADE.
República Dominicana: Protagonista del Cambio Energético Regional
En el corazón de este movimiento continental destaca la República Dominicana, que no solo participa en la transformación regional sino que lidera con decisión el camino hacia un futuro energético sostenible. El país caribeño, durante este mismo período, consolidó su logro de alcanzar el 25% de participación renovable en su matriz energética, cumpliendo una meta establecida por la Ley de Estrategia Nacional de Desarrollo y demostrando que las ambiciones energéticas limpias son completamente alcanzables meta dominicana.
Este reconocimiento representa mucho más que un número: es la confirmación de que una pequeña nación insular puede competir al nivel de potencias energéticas globales en la adopción de tecnologías limpias. Edward Veras, director ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía, expresó lo que muchos dominicanos sienten: "En 2021 parecía impensable cumplir esta meta, pero gracias a la inversión nacional e internacional, la reducción de costos en tecnologías como los paneles solares y el trabajo conjunto de las instituciones del sector eléctrico, hoy podemos decir que uno de cada cuatro kilovatios-hora que consumimos proviene de fuentes limpias como la solar, eólica, hidroeléctrica y biomasa" declaraciones del director de la Comisión Nacional de Energía.
La Infraestructura que Sostiene el Cambio
La incorporación de más de 1,000 megavatios de nueva capacidad de generación eléctrica durante 2025 representa un esfuerzo monumental en ingeniería y planificación. De este volumen, 700 megavatios provienen exclusivamente de fuentes renovables, reflejando una preferencia clara por energías limpias y la confianza del sector privado en el sector renovable dominicano expansión de la capacidad nacional.
Este crecimiento no ocurre en el vacío, sino que se sustenta en una estrategia integral de expansión. La República Dominicana está fortaleciendo su red de transmisión con proyectos tan ambiciosos como la ampliación de líneas de transmisión a 345 kilovoltios en la zona noroeste, que será inaugurada durante este año. Estas inversiones en infraestructura son fundamentales para garantizar que la energía renovable generada en diversas regiones del país pueda llegar eficientemente a todos los hogares y negocios dominicanos ampliación de líneas eléctricas.
La diversificación geográfica de los proyectos también merece destacarse. Desde Pepillo Salcedo hasta Gaspar Hernández, desde Puerto Plata hasta Azua, la geografía dominicana se está cubriendo de parques solares, molinos eólicos e instalaciones de biomasa que transforman el paisaje del país en una galería de sostenibilidad diversificación del mapa energético.
Almacenamiento de Energía: La Pieza Clave del Puzzle
Un aspecto que distingue la estrategia dominicana es el énfasis en sistemas de almacenamiento energético. Se proyecta una adición de 300 megavatios de capacidad de almacenamiento mediante baterías, permitiendo que la energía solar capturada durante el día pueda utilizarse en horas nocturnas, reduciendo así la dependencia de combustibles fósiles plan dominicano para almacenamiento.
Estas normativas inteligentes, que exigen que los proyectos solares cuenten con un 50% de capacidad de almacenamiento en baterías, posicionan a República Dominicana como pionera en la región en integración de tecnologías complementarias que aseguran la confiabilidad del sistema eléctrico.
La Escala de la Transformación
Los logros revelan la magnitud del cambio. A mediados de 2025, aproximadamente el 22% de la electricidad dominicana provenía de fuentes renovables, cifra que ha más que duplicado la capacidad instalada en apenas unos años. Pero el indicador más sorprendente ocurrió en febrero de este año, cuando, por primera vez en la historia dominicana, las fuentes renovables inyectaron 1,222.75 megavatios al Sistema Eléctrico Nacional Interconectado, superando en ese momento instantáneo a la generación térmica nuevo récord nacional.
La generación distribuida también experimentó un crecimiento extraordinario, con más de 460 megavatios instalados en techos solares de hogares, comercios e industrias. Esto representa no solo una multiplicación de fuentes energéticas, sino una democratización de la generación eléctrica, donde millones de dominicanos contribuyen directamente a la seguridad energética nacional generación distribuida.
De 25 a 30 por Ciento: La Visión del Futuro
Los logros actuales no son el destino, sino apenas el principio del camino. La República Dominicana ha establecido una visión clara para 2030: alcanzar el 30% de generación renovable en su matriz energética. Con 17 proyectos adicionales en construcción que agregarán aproximadamente 1,207 megavatios, y con una nueva licitación de proyectos de generación y almacenamiento próxima a lanzarse, el país está posicionándose para superar incluso sus propias expectativas proyección sobre futuro energético dominicano.
Un Imán de Inversión en el Caribe
El dinamismo del sector renovable dominicano ha atraído la atención de inversores globales. La República Dominicana se ha convertido en el quinto destino de América Latina en atracción de capital para energía durante 2025, reconocimiento que habla de la confianza internacional en la estabilidad regulatoria y las oportunidades que ofrece el país inversión internacional.
Las políticas públicas han sido determinantes en este éxito. Un marco regulatorio estable, el financiamiento facilitado, la diversificación de la matriz energética y la reducción acelerada de costos en tecnologías renovables han creado el ambiente perfecto para que empresas nacionales e internacionales apuesten por proyectos de energía limpia en territorio dominicano.
Un Liderazgo Reconocido en la Región
Mientras América Latina y el Caribe alcanzaban su 71% de renovabilidad en junio de 2025, solo nueve países superaron ese promedio regional. Paraguay y Costa Rica llegaron al 100%, Uruguay al 98%, Brasil al 95%, Venezuela al 92%, Colombia al 91%, Ecuador al 90%, Belice al 77% y Panamá al 71%. La República Dominicana, con su 25% de participación renovable alcanzado en 2025, se posiciona como un actor emergente de especial relevancia en el Caribe, una región que históricamente ha enfrentado mayores desafíos en la transición energética debido a su dependencia de combustibles importados realidad caribeña.
Beneficios Multidimensionales para la Nación
Los beneficios de esta transformación trascienden el sector energético. La seguridad energética mejora significativamente cuando la diversificación reduce la vulnerabilidad a fluctuaciones de precios internacionales de combustibles fósiles. El empleo crece con la creación de miles de puestos de trabajo en instalación, mantenimiento y operación de infraestructura renovable. La salud pública se fortalece al reducirse la contaminación del aire derivada de plantas térmicas. Y el cumplimiento de compromisos internacionales contra el cambio climático posiciona a la República Dominicana como una nación responsable en el escenario global.
Edward Veras enfatizó esta realidad multifacética: "Este 25% es solo el comienzo. Estamos construyendo un sistema eléctrico más limpio, resiliente y competitivo, que traerá beneficios económicos y ambientales
























































