El paraninfo de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo se transformó en escenario de un acto profundamente simbólico la tarde del nueve de diciembre. Militares y policías del Cuerpo de Seguridad Presidencial, una flotilla de vehículos de alto cilindraje y estrictas medidas de seguridad crearon una atmósfera que trascendía lo ordinario de un homenaje civil. Grúas de DIGESETT removían vehículos, estableciendo rutas controladas para los invitados: amigos, colegas y admiradores convocados a presenciar la entrega de un galardón que representa mucho más que un reconocimiento profesional.
La periodista Edith Febles recibió el Reconocimiento a la Integridad y la Lucha contra la Corrupción de manos de Participación Ciudadana, el movimiento cívico no partidista que representa al capítulo dominicano de Transparencia Internacional. La presencia del presidente de la República, Luis Abinader Corona, añadió una dimensión especial al evento, pero fue el gesto sobrio del mandatario lo que captó la atención: un presidente constitucional que asistió a la entrega sin utilizar el escenario para promover su propia imagen, permitiendo que la esencia del acto permaneciera intacta.
Más de Tres Décadas de Compromiso Ético
La maestría de ceremonias, la periodista Amelia Deschamps, describió a la homenajeada como parte de una generación que se negó a quedarse en la superficie de los hechos. Febles representa a esa estirpe de profesionales que eligieron atravesar la superficialidad de los acontecimientos para llegar a la verdad esencial, aquella que no admite maquillajes ni complicidades.
Edith Febles comenzó a marcar diferencias desde los años noventa, cuando investigó y denunció casos de abuso infantil en instituciones que pretendían tener valores cristianos en Higüey. Esa primera herida colectiva que decidió exponer la convirtió en una periodista que, sin proponérselo, asumió una responsabilidad que marcaría toda su carrera: cargar con el país sin callar lo que duele.
Su trayectoria profesional se caracteriza por la defensa inquebrantable de los sectores más vulnerables. Mantiene su mirada fija en quienes tienen menos voz, menos defensa y menos oportunidades: las víctimas silenciosas de la corrupción, aquellos ausentes en los discursos oficiales pero presentes en las estadísticas del abandono. Ha denunciado tramas y entramados de todo tipo, incluyendo el caso más reciente que afecta los recursos del Seguro Nacional de Salud, revelando fallas estructurales que comprometen la confianza pública en instituciones fundamentales.
El Periodismo Como Servicio Público
Participación Ciudadana situó a Febles dentro de esa estirpe de periodistas que comprenden su oficio como un servicio público, no como espectáculo ni ornamento. Un servicio público ejercido en un territorio donde las garantías suelen ser frágiles y donde cada investigación implica riesgos, presiones y silencios incómodos. La certificación oficial del Consejo Nacional de Participación Ciudadana resaltó que es un ejemplo de periodismo apegado a los principios éticos, comprometido con la justicia social y la lucha contra la corrupción y la impunidad.
Su tránsito por radio, prensa escrita, televisión y redes sociales demuestra que la ética no depende del formato elegido. Su espacio digital Edith Febles, tal como es confirma que el liderazgo de opinión nace de la credibilidad ganada a pulso, no del artificio tecnológico. En cada plataforma, Febles ha logrado trasladar un principio simple pero exigente: informar con rigor, decir sin miedo, nombrar lo que muchos prefieren dejar en penumbra.
El Simbolismo de la Flor de Loto
El trofeo entregado por el Comité Ejecutivo de Participación Ciudadana adoptó la forma de una flor de loto, símbolo que no fue casual. La flor de loto representa la transparencia que emerge incluso del barro, la pureza que surge en medio de la adversidad. En un país donde la corrupción a veces parece una sombra interminable, ese símbolo adquiere especial significancia cuando se coloca en manos de quien ha dedicado más de treinta años a combatirla.
La coordinadora general de Participación Ciudadana, Leidy Blanco García, expresó con claridad el significado del reconocimiento: representa un símbolo de la fuerza de la verdad, el valor de la independencia y el compromiso inquebrantable con la integridad. Recordó a la audiencia que luchar contra la corrupción es, ante todo, un acto de valentía, y que Edith Febles es una prueba viva de esta verdad.
Una Ceremonia de Especial Significado
Entre el público se mezclaban rostros conocidos y otros casi invisibles, pero todos unidos por una emoción común: la reivindicación de una forma de ejercer el periodismo que no siempre ofrece recompensas inmediatas. Muchos allí sabían que el precio de esa coherencia puede ser el aislamiento, la incomodidad o los ataques directos. Por eso la entrega del galardón tuvo el poder de una justicia merecida, el reconocimiento de un camino recorrido con dignidad en tiempos que frecuentemente desalientan la honestidad profesional.
La noche no celebró solamente a una periodista excepcional. Celebró una forma de ciudadanía ejercida desde la palabra y la investigación, un recordatorio de que en una nación donde los desafíos democráticos persisten, todavía hay voces que prenden luces. Luces que no iluminan para exhibirse, sino para que todos podamos ver un poco mejor, para que la verdad llegue a quienes la necesitan, para que la corrupción encuentre resistencia en la palabra valiente de periodistas comprometidas como Edith Febles.
Este reconocimiento también reafirma el compromiso institucional de Participación Ciudadana con la transparencia y la rendición de cuentas. En un contexto donde la desconfianza ha tocado las puertas de cada hogar dominicano a causa de casos de corrupción que se convierten en traiciones directas a la dignidad humana y la esperanza colectiva, la labor de periodistas como Febles resulta más necesaria que nunca. Su trabajo contribuye al fortalecimiento de la cultura democrática y a la formación de una ciudadanía informada, vigilante y exigente.
La ceremonia en la Universidad Autónoma de Santo Domingo quedará registrada como un momento significativo para la nación dominicana, no solo por el galardón otorgado, sino por lo que representa: la afirmación de que la integridad y la verdad no retroceden, que la independencia de criterio sigue siendo posible, y que existen dominicanas y dominicanos dispuestos a cargar con la responsabilidad de informar sin miedo, de investigar sin complacencias y de mantener viva la esperanza de una República mejor.
Referencias usadas en Artículo
- Participación Ciudadana reconoce trayectoria ética de la periodista Edith Febles
- Participación Ciudadana reconoce la trayectoria ética y ejemplar de la periodista Edith Febles
- Entregan a la periodista Edith Febles galardón anticorrupción
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